lunes, 30 de septiembre de 2013

LOS YANQUIS. GARGANTA PROFUNDA. GUERA BIOLOGICA CONTRA EL MUNDO. Y (3)



"Odio eterno a los que deseen sangre y la derramen injustamente”.
Simón Bolívar.
¿Tiene Estados Unidos moral, ética, vergüenza para imponer sus criterios para aconsejar sobre las vidas que se pudiera perder por la utilización de esas terribles armas como son las químicas?
No tiene moral ni ética. Lo que le sobra es la doble moral.
Continuemos con lo prometido:
BERTOLT BRECHT 
Cuando los que luchan
contra la injusticia
muestran sus caras ensangrentadas,
la incomodidad
de los que están a salvo
es grande. ¿Por qué se quejan ustedes?,
les preguntan.
¿No han combatido la injusticia?
Ahora ella los derrotó.
No protesten.
El que lucha debe saber perder
El que busca pelea
se expone al peligro.
El que enseña la violencia
no debe culpar a la violencia.
Ay, amigos.
Ustedes que están asegurados,
¿por qué tanta hostilidad?
¿Acaso somos vuestros enemigos
los que somos enemigos de la injusticia?
Cuando los que luchan contra la injusticia
están vencidos,
no por eso tiene razón
la injusticia.
Nuestras derrotas
lo único que demuestran
es que somos pocos
los que luchan contra la infamia.
Y de los espectadores, esperamos
que al menos se sientan avergonzados.
Unidad y Resistencia¨08-12-12

¿Quién va a intervenir?
Guerra bacteriológica: los antecedentes de EE.UU.

Traducido para Rebelión por Silvia Arana

Estados Unidos ha desplegado su arsenal de armas químicas y biológicas contra Filipinas, Puerto Rico, Vietnam, China, Corea del Norte, Vietnam, Laos, Camboya, Cuba, Canadá y haitianos emigrantes, además de exponer a cientos de miles de ciudadanos estadounidenses a una asombrosa variedad de agentes infecciosos y productos químicos tóxicos, matando a docenas de personas. 
Los experimentos de EE.UU. con armas biológicas se remontan a la distribución de mantas infectadas con gérmenes del cólera entre pueblos indígenas de Norteamérica en la década de 1860. En 1900, médicos del ejército de EE.UU. infectaron en Filipinas a cinco prisioneros con una variedad de plagas y 29 prisioneros con Beriberi. Al menos cuatro de esas personas murieron. En 1915, un doctor cuyo trabajo estaba financiado por el gobierno, expuso a 12 prisioneros en Mississippi a la pelagra, una enfermedad que produce discapacidades al atacar el sistema nervioso central.
Después de la I Guerra Mundial, EE.UU. desarrolló un amplio abanico de armas químicas, produciendo millones de barriles de gas mostaza y lewisite. Miles de soldados estadounidenses fueron expuestos a estos agentes químicos para "probar la eficacia de las máscaras antigás y de los trajes protectores". La Agencia para Veteranos de Guerra se negó a reconocer los reclamos por discapacidad presentados por las víctimas de tales experimentos. El ejército también usó gas mostaza para reprimir manifestaciones anti-EE.UU. en Puerto Rico y las Filipinas en las décadas de 1920 y 1930.
En 1931, el Dr. Cornelius Rhoads, quien entonces trabajaba para el Instituto Rockefeller de Investigaciones Médicas, inició sus espantosos experimentos con cáncer en Puerto Rico, inoculando células cancerígenas en docenas de personas -que desconocían por completo la naturaleza de los experimentos. Al menos trece de las víctimas murieron. Posteriormente, Rhoads dirigió la división de Armas Biológicas del Ejército de EE.UU. y formó parte de la Comisión de Energía Atómica, donde supervisó experimentos con radiaciones realizados con miles de ciudadanos estadounidenses. En memos al Ministerio de Defensa, Rhoads expresó su opinión de que los disidentes de Puerto Rico podrían ser "erradicados" con el oportuno uso de bombas bacteriológicas.
En 1942, médicos del ejército y de la armada de EE.UU. infectaron con malaria a 400 prisioneros en Chicago, un experimento diseñado para obtener "un perfil de la enfermedad y desarrollar un tratamiento contra ella". La mayoría de los presos eran afroamericanos y ninguno recibió información sobre los riesgos que corrían. Estos experimentos con la malaria en Chicago fueron invocados en la defensa de médicos nazis en el juicio de Nuremberg.
Al finalizar la II Guerra Mundial, el ejército de EE.UU. contrató al Dr. Shiro Ishii, jefe de la unidad de guerra biológica del Ejército Imperial de Japón. El Dr. Ishii había empleado una variedad de agentes químicos y biológicos contra tropas chinas y de los aliados. También manejaba un importante centro de investigación en Manchuria, donde se realizaban experimentos con armas biológicas usando a prisioneros de guerra chinos, rusos y estadounidenses. Ishii infectó a los prisioneros con tétanos; les dio tomates contaminados con tifoidea; infectó pulgas con plagas; inoculó la bacteria que produce sífilis en un grupo de mujeres; realizó disecciones en prisioneros vivos; e hizo explotar bombas bacteriológicas sobre docenas de hombres estaqueados. Como resultado de una negociación con el General Douglas MacArthur, Ishii le entregó al ejército de EE.UU. más de 10.000 páginas de sus "datos investigativos", eludió un juicio por crímenes de guerra y fue invitado a dar una conferencia en Fort Detrick, el centro de armas biológicas del ejército de EE.UU. en Frederick, Maryland.
En 1950, la armada de EE.UU. fumigó grandes cantidades de Serratia marcescens, un agente bacteriológico, sobre San Francisco, causando el brote de una enfermedad similar a la neumonía y provocando la muerte de, al menos una persona, Ed Nevins.
Un año después, el Primer Ministro de China, Chou En-lai denunció que los militares y la CIA de EE.UU. habían usado agentes biológicos contra Corea del Norte y China. Chou presentó declaraciones de 25 prisioneros de guerra estadounidenses que respaldaron su reclamo de que EE.UU. había lanzado plumas contaminadas con ántrax, mosquitos y pulgas portadores de fiebre amarilla y volantes contaminados con cólera sobre Manchuria y Corea del Norte.
De 1950 a 1953, el ejército de EE.UU. lanzó nubes químicas sobre seis ciudades de EE.UU. y Canadá. Las pruebas tenían la finalidad de hacer tests de patrones de dispersión de armas químicas. Los registros del ejército señalan que los componentes usados en Winnipeg, Canadá, donde se registraron numerosos casos de enfermedades respiratorias, incluían cadmio, un químico altamente tóxico.
En 1951, el ejército de EE.UU. contaminó de manera secreta el Centro de Abastecimiento Naval de Norfolk, en Virginia, con una bacteria infecciosa. Se escogió un tipo especial de bacteria a la que los afroamericanos eran más susceptibles que los blancos. Un experimento similar ocurrió un año más tarde en el Aeropuerto Nacional de Washington, DC. La bacteria, se determinó después, había estado conectada con envenenamientos del torrente sanguíneo y de alimentos, y con problemas respiratorios.
Savanna, Georgia, y Avon Park, Florida, fueron el foco de repetidos experimentos con armas biológicas en 1956 y 1957. Investigadores del ejército en armas químicas y biológicas lanzaron millones de mosquitos en dos pueblos para poner en prueba la habilidad de los insectos para transmitir la fiebre amarilla y el dengue. Causaron la enfermedad de cientos de residentes, que sufrieron episodios de fiebre, problemas respiratorios, encefalitis, muerte fetal y tifoidea. Los investigadores del ejército fingieron ser empleados de salud pública para fotografiar a las víctimas y hacer tests con ellos. Se reportaron varias víctimas fatales.
En 1965, el ejército de EE.UU. y la Dow Chemical Company inyectaron dioxina en 70 prisioneros (la mayoría afroamericanos) de la prisión estatal Holmesburg, en Pennsylvania. Los presos presentaron lesiones graves, y no recibieron tratamiento durante siete meses. Un año después, el ejército de EE.UU. lanzó la operación de guerra química más ambiciosa en la historia.
De 1966 a 1972, EE.UU. lanzó más de 12 millones de galones de Agente Naranja (un herbicida con dioxina) sobre aproximadamente 1,82 millones de hectáreas en Vietnam del Sur, Laos y Camboya. El gobierno de Vietnam estimó que el Agente Naranja causó la muerte de más de 500.000 civiles. El legado continúa con altos niveles de defectos congénitos en áreas que habían sido saturadas con químicos. Decenas de miles de soldados estadounidenses también se cuentan entre las víctimas del Agente Naranja.
En un experimento que continúa con la categoría de "clasificado" hasta hoy, el ejército de EE.UU. fumigó con un agente bacterial no identificado el sistema de transporte subterráneo de Nueva York en 1966. Se desconoce si el test causó algún tipo de enfermedad.
Un año después, la CIA colocó una sustancia química en las fuentes de agua potable de la sede central de la Agencia de Alimentos y Medicamentos en Washington, DC. El test había sido diseñado para comprobar si era posible envenenar el agua potable con LSD u otros alucinógenos.
En 1969, el Dr. D.M. McArtor, vicedirector de Investigación y Tecnología del Ministerio de Defensa, solicitó al Congreso $10 millones de dólares para desarrollar un agente biológico sintético que sea resistente "a los procesos inmunológicos y terapéuticos de los que dependemos para mantener una libertad relativa de las enfermedades infecciosas".
En 1980, cientos de hombres haitianos, que habían sido prisioneros en campos de detención en Miami y Puerto Rico, presentaron síntomas de ginecomastia después de haber sido inyectados con "hormonas" por médicos de EE.UU. Ginecomastia es una patología en la que el tejido del seno masculino se agranda.
Cuatro años después, una epidemia de dengue hemorrágico azotó Managua, Nicaragua. Casi 50.000 personas se enfermaron y docenas murieron. Este fue el primer brote de dengue hemorrágico en Nicaragua. Ocurrió en el momento más álgido de la guerra contra el gobierno sandinista y después de una serie de vuelos bajos de "reconocimiento" sobre la ciudad capital.
Al finalizar la Guerra del Golfo, el ejército de EE.UU. hizo estallar un depósito de armas químicas iraquíes en Kamashiya. En 1996, el Ministerio de Defensa finalmente admitió que más de 20.000 militares de EE.UU. habían sido expuestos a gases VX y sarín a raíz de la operación realizada en Kamashiya. Eso podría ser una de las causas de la llamada "enfermedad de la Guerra del Golfo". Otra de las causas fue, sin duda, la inoculación experimental de vacunas en más de 100.000 militares.
Este ensayo es un fragmento de su libro Grand Theft Pentagon 
Rebelión: 06-09-13

Si los estadounidenses comunes y corriente supieran, como nosotros lo sabemos, y como probablemente lo sabe la mayoría de los pueblos del mundo, que Putin dijo textualmente en una rueda de prensa que Rusia apoyará y ayudará a Siria militarmente, si Siria fuese atacada militarmente (en este caso, por EEUU y sus aliados), es casi seguro que esos ciudadanos de EEUU gritarían muchísimo más fuerte en contra de ¡¡maldito CRIMINAL!! Obama y su ¡¡gobierno CRIMINAL!! para que no lancen ese ataque. Pero esto no es el caso.
Antes de haber investigado el asunto de lo que Putin dijo en el video, me imaginaba a los estadounidenses sencillos, comunes y corrientes, que todavía fuesen algo sinceros, medio normales, y parcialmente pensantes, discutiendo en las calles, oficinas, bares y guaguas, repitiendo sin cesar: “Pero, no podemos atacar a Siria, porque Putin dijo que Rusia les ayudaría militarmente. Sería un suicidio, Rusia es enorme, y son amigos de los chinos también, y eso sería equivalente a 1300 millones de chinos y 140 millones de rusos, un total de más de 1400 millones de ellos contra solamente 300 millones de nosotros, casi 5 por 1, nos aplastarían, y sabemos que Rusia y China tienen bombas nucleares también. Eso no tiene sentido. Además, estamos muy lejos de Siria, y Siria es un pequeño país de nada, y Rusia y China están por allí cerquita en algún lado. Sería un suicidio, no podemos permitirlo. Sería una enorme estupidez.”
En otras palabras, la gran mayoría de los estadounidenses deben estar pensando, “¡Vamos! ¡¡Aplastemos a ese dictador comunista terrorista en Siria!! Somos poderosos, y nadie nos puede ganar. Somos fantásticos, y los sirios son solamente unos pocos pobrecitos árabes musulmanes sucios e ignorantes que no saben nada sobre la libertad y la democracia. ¡Son perros! ¡Vamos a matarlos! ¡Vamos a liberarlos!”
¿Cómo es que tanta gente fuera de EEUU sabe lo que dijo Putin, y fue MUY CLARO, y casi nadie en EEUU lo sabe? Eso es un CRIMEN del gobierno de EEUU en contra de su propio pueblo. Como siempre.
Ahora sabemos por qué la mayoría de los gringos son tan ignorantes.
¿Ignorantes o zombis?  Veamos:
Hace mucho tiempo que estoy oyendo un invento de estos malditos yanquis. ¿De qué estamos hablando?
Llevado por la curiosidad me adentro en el, aun sabiendo lo muy sospechosos por no ser trigo limpio, Google y le pido “HAAP”.
Nos dice lo siguiente:
“Palabras clave: HAARP, SURA, modificación del clima, controlar la temperie, ionosfera, tiempo, Tesla, ondas electromagnéticas, armas meteorológicas.
Quizás a algunos no les suenen estas siglas, pero pertenecen a un misterioso proyecto de la Fuerza Aérea norteamericana cuyas siglas HAARP, High Frequency Advanced Auroral Research Project. Traducido al español sería, Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia. En unas instalaciones militares situadas en Gakona, Alaska, se está desarrollando un misterioso proyecto el cual consiste en 180 antenas que funcionando en conjunto será como una sola antena que emitirá 1 GW =1.000.000.000 W, es decir un billón de ondas de radio de alta frecuencia las cuales penetran en la atmósfera inferior e interactúan con la corriente de los elecrojets aureales.
“Proyecto HAARP”
“El Proyecto HAARP es un experimento esquimal, inventado por Nikola Tesla, que consiste en producir millones de microondas en una instalación en Alaska, enviarlas a un satélite indetectable en el espacio y proyectar algún punto del planeta para conquistar el mundo y, por qué no, calentar un poco el clima del Polo Norte”.
“A HAARP se le ha culpado en ocasiones por accionar catástrofes de proporciones bíblicas tales como inundaciones masivas, sequías devastadoras, potentes huracanes, tornados y tormentas eléctricas, y devastadores terremotos en Afganistán y las Filipinas, dirigidos a la agitación de terroristas. A HAARP también se le ha acusado de haber causado los principales apagones en el oeste norteamericano, la caída del vuelo 800 de TWA, enfermedades misteriosas como el Síndrome del Golfo o el Síndrome de fatiga crónica. Algunos afirman que HAARP es un aparato de control mental que provoca la alienación de los jóvenes, como los que causaron la masacre del Instituto Columbine y en otros lugares (inclusive se venden dispositivos que bloquean las emisiones del HAARP que alteran la mente). Se ha descrito como un arma capaz de hacer un escudo antimisiles, o como un rayo de la muerte que podría convertir el planeta Tierra en un lugar inhabitable, se ha dicho que interfiere con las migraciones de las aves, que es un arma diabólica fabricada por las fuerzas del Anticristo, un destructor de comunicaciones global, un aparato que causaría que la tierra girase fuera de control y que es un sistema vinculado a actividades de ovnis”.
Esto lo dice: David Naiditch en eSKEPTIC
Es posible que dentro de unos 40 o 50 años sepamos algo de este siniestro proyecto. Para entonces, todos calvos. Por lo menos en lo que respecta a quien suscribe no le afectara el resultado del informe ya que estaré verdaderamente calvo.
“Control mental
“Gente siendo abducida por el satélite del HAARP para oscuros propósitos.
Por si fuera poco, el HAARP también puede controlar la mente, así, como lo leyó, los esquientíficos descubrieron como logar el dominio de la psiquis de los demás, y es que cuando envías las ondas de la muerte con la frecuencia correcta, puedes estimular la propia frecuencia de los cerebros humanos haciéndolos ponerse muy tristes, o felices.
Cuando le lanzas millones de microondas a un pollo, seguramente quedará delicioso, cuando se las lanzas a un manifestante, de seguro también queda delicioso, pero muy adolorido, pero cuando lo haces contra la corteza terrestre entonces obtienes otro resultado, las moléculas de la lava empiezan a vibrar como si bailaran la Lambada, luego las rocas ceden ya que también les gusta la música latina y entonces se ponen a bailar, lo que provoca que allá arriba todo se vuelva mierda”. 
Ante estos datos nos queda manifestar que ¿el pueblo norteamericano está inducido por estos elementos de inventos contra la humanidad?
No obstantes se nos hace de obligado cumplimiento traer a colación lo siguiente. Dejamos claro que quien suscribe no tiene ni ideas de lo que se manifiesta. Pero le damos crédito por tratarse del ENEMIGO de la HUMANIDAD.
Desde mi poco conocimiento sobre el tema no nos atrevemos decir algo sobre el tema anunciado:
Los Estados Unidos nos atacan con gas mostaza… ¡cuidado!
Por: José Agustín Reverón
Oficialmente los Estados Unidos han seguido atacando con GAS MOSTAZA, al mundo entero.
Este gas mostaza es el arma química más aterradora usada en toda la Historia de la humanidad.
Ahora bien, con este, “esplendido” record, los emporios financieros políticos y farmacéuticos de los Estados Unidos crearon en base a esta arma letal, un “medio” para “curar” el cáncer.
Es tomada como “terapia” para combatir el cáncer, se viene utilizando para atacar “invisiblemente” a la humanidad que sufre de este mal y es convertido ese ataque, en un método oficial de "tratamiento", que muchas naciones del mundo la han acogido.
¿Qué es peor la cura o la enfermedad?
El gas mostaza Bis-(2-cloroetil) sulfuro, fue sintetizado por primera vez en 1860 por FREDERICK GUTHRIE, co-fundador del London Instituto of Physics.
Este fue quien bajo un profundo estudio, fundamentó por primera, vez los tóxicos efectos del gas mostaza, cuando la aplicó a su propia piel, en una mezcla de etileno y dicloruro de azufre.
Posteriormente a la Segunda Guerra Mundial, han seguido utilizando esa mutación del gas mostaza, en “quimioterapias” que solo producen un verdadero desastre en la salud de quienes se les aplica.
La masacre continuó, producen “alimentos” tóxicos, los cuales atacan a la salud y es por ello que a consecuencia de esa ingesta de "alimentos", se genera un programa de tratamientos con quimioterapias y radiación en las enfermedades inducidas químicamente.
Todo, se ha planificado, no para prevenir y curar enfermedades, sino para proseguir con un plan maléfico, engañando a todos los que padecen de este mal, para que se sometan a torturas reales y “legales”.
En términos simples, la mostaza de azufre es básicamente el “huevo” del cual la quimioterapia ha salido.
Las pruebas clínicas prueban que la mostaza de nitrógeno, ayuda a que los tumores temporalmente retrocedan, pero la medicación no puede continuar de forma perpetua, ya que esta induce a padecer neutropenia (la reducción severa de los glóbulos blancos en la médula ósea que ingieren las bacterias). Por tanto, después de la retirada obligatoria de la medicación, hay una reaparición abrupta de los tumores. Alimentan al Pueblo con Toxinas, después viene la asesino-quimioterapia. Mosca con eso!
Aporrea: 14-09-13
“Dios salve a América” es lo que dice todos estos imbéciles. Como si el resto del mundo estuviera con el diablo. Todo con el supuesto de que “Dios” existiera. Decimo esto por lo siguiente: De este señor no hay ni una mínima imagen que nos pueda decir que existió. Mientras tanto estamos de acuerdo con lo que dice el dirigente sindical del SALT cuando dice: “Si Jesús viviera, estaría con nosotros con los carritos del Mercadona”
Diego Cañamero critica el papel de la Iglesia oficial en el Congreso de la Asociación de Teólogos y Teólogas Juan XXIII.

Es decir que si el mundo no contara con un pueblo llamado los Estados Unidos el mundo sería otro. De seguro que seriamos más felices. No hubiera tantos muertos inocentes.
Cuando ese país reacciona es cuando les matan a sus hijos los cuales son mercenarios con cuyo dinero viven sus familiares. Dinero manchado de sangre  de inocentes. Por ello es  porque les duele mucho. Mientras creen que nuestros muertos no nos deben doler.
Estas gentes no entienden las muertes ajenas. ¿Entonces por qué le duelen cuando caen esos mercenarios gringos?
He querido hacer esta recopilación ya que sería interminables los crímenes que estos bandidos han cometidos a través de la historia aunque hay un tal  fulano llamado Juan Verde que nos quiere vender a este indeseable país cuna del fascismo, como ejemplo a seguir y pide que hay que protegerlo por el bien de la humanidad. ¡¡¡Hay que joderse, con estos fascistas al servicio del imperio!!! Para  colmo y más insulto a la inteligencia presume de ecologista. ¿El gobierno de los Estados Unidos ha firmado el acuerdo de Kioto?
Quizás tengamos que escribir algo de este elemento que va por el mundo como cualquier Barman  o Spiderman del siglo XXI. Terde (Telde) también da estos elementos. La viña del “señor” que es así.
De todas formas no se preocupe por la especie humana ya que según acaban de descubrir los científicos la  “Tierra dejará de ser habitable dentro de 1.750 millones de años
Basándose en la distancia del sol y las temperaturas a las que es posible que el planeta tenga agua líquida, un estudio científico determina cuando el calor hará imposible la vida humana y animal.”
Por último señalar que ha parecido la última guinda para terminar con el pastel:
 “En Siria, la ONU debe intervenir”
La entrevista de Milenio deriva hacia la situación en Siria y el periodista pregunta si se justifica una intervención en Siria el uso de armas químicas.  “El uso de armas químicas es delictivo en sí mismo ─ responde Garzón.─ Es un crimen de guerra contra la humanidad y puede ser de genocidio. Su uso impone la acción de la justicia internacional de la CPI; pero al no ser Siria miembro de la misma, no creo que el Consejo de Seguridad lo autorice por el derecho de veto de Rusia y China. Solo la abstención de estos países permitiría la intervención. La intervención militar solo se justificaría con autorización de la ONU. Lo que está aconteciendo en Siria es inasumible para la comunidad internacional y es la ONU la que debe intervenir.”
El Plural: 09-09-13
En fin….”Dios” salve América. Río Bravo abajo. Hasta la Patagonia.
¡¡LIBERTAD PARA LOS CUATROS HÉROES (YA TENEMOS UNO EN CASA) CUBANOS PRESOS EN LAS CÁRCELES DE LOS ESTADOS UNIDOS POR LUCHAR CONTRA EL TERRORISMO!!!

Saludos Republicanos.
La Habana, 19-09-2013
Manuel Trujillo Artiles
Publico.es: 19-09-13

No hay comentarios:

Publicar un comentario