domingo, 18 de septiembre de 2016

CUMBRE DE PAÍSES NO ALINEADOS (MNOAL) EN LA ISLA DE MARGARITA-VENEZUELA



El discurso de los llamados intelectuales de este sistema debe mantener el túnel en la oscuridad, profundizar la oscuridad y conservar el espíritu del sin salida y la degradación de cualquier gesto colectivo, de cualquier palabra que nombre la sociedad humana capaz de construirse por sí misma. Hay que degradar a todos aquellos que dieron su vida para cambiar el mundo, hay que confundirlos y equipararlos con los boys del dinero fácil y el cinismo amplio, hay que atornillar bien la imposibilidad de cualquier cambio porque el sistema capitalista se cae a pedazos y esa fragilidad necesita discursos apocalípticos –a-históricos- de alta gama. Y si hay que mentir se miente sin ninguna vergüenza, para eso usaremos el relativismo y el sentimentalismo, metástasis del canceroso YO
Sara Rosenberg

Si ustedes han recorrido las portadas de los periódicos como lo ha hecho quien suscribe se habrán dado cuenta que en la isla de Margarita-Venezuela no ha pasado nada.
Pensamos que debe ser por aquello de lo interesarle al imperio norteamericano como tampoco el imperio viejo de  Europa.
Las órdenes como buenos lacayos se cumple al pie de la letra.
Es decir que leyendo las portadas de los periódicos digitales no ve usted ni una “j” de lo que están haciendo los 120 países llamado No Alineados. Es decir que no se llevan bien con los yanquis. Como tampoco con los  imperialistas europeos.
Por tratarse de países, Estados Unidos y Europa llamados sibilizados, que presumen de defender la libertad de expresión y de información como también la democracia es extraño que a sus lectores se les tengan mudo y desinformado de algo que deben estar en las primeras páginas.
De todas formas no es de extrañar que tampoco se dice del golpe de Estado que le dieron a Dilma Rousseff en Brasil. Como tampoco el golpe de Estado en MERCOSUR contra  Venezuela.
Tampoco dicen nada de los desastres contra los trabajadores y capas populares del fascista Mauricio Macri en Argentina. Menos todavía de lo que pretende hacer el otro fascista llamado Michel Temer de Brasil que intenta vender su pueblo al diablo mismo.

Ya nos decía ELIZABETH STROUT  premio Pulitzer 2009, que “Leer mala literatura es como comer comida basura”. Eso es lo que se come diariamente ya que es el plato que se nos pone delante.

Fíjense como se maneja la información: Días atrás Canarias7: 02-09-16 nos trae lo siguiente: “Venezuela se echa a la calle contra Maduro”.  Si leyéremos ese artículo nos da la impresión que Venezuela está tomada por los mercenarios del imperio. Nos ilustra, además,  con una foto donde se ven una inmensa multitud con camisas rojas y se nos hace creer que son los fascistas venezolanos. Esas camisas rojas pertenecen a los hijos del Eterno, Siempre Vivo,  Hugo Chávez Frías.

Para ver las cantidades de mentiras que dice en el mencionado artículo se invita a que lo busquen y vean lo que es la exaltación a creerse las mentiras.  Esto por citar un artículo de un determinado periódico. Ya que en todo el país llamado España nos dice lo mismo. ¡¡¡¡MENTIRAS!!!! Estas  gentuzas siguen aspirando que vuelva “aquel” en su Plaza de Oriente donde no cabían más de 30 o 40 mil personas pero nos decía José Solís Ruiz y Manuel Fraga Iribarne que habían más  de un millón. Y nos lo creímos. Era de obligado cumplimiento.

Para que contarles; lo que ya se sabe desde hace mucho tiempo. Los lacayos y lameculo del imperio no pueden decir la verdad.

Por todo ello nos vemos obligado traer la intervención del General del Ejército y Presidente de la República Soberana y Libre de Cuba Raúl Castro Ruz en su intervención en dicha asamblea en Margarita  que nos dice lo siguiente:

Raúl Castro en Cumbre NOAL: No puede subestimarse nuestra enorme fuerza cuando actuamos concertadamente
Por: Raúl Castro Ruz
Discurso pronunciado por el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, en la XVII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados, Isla de Margarita, Venezuela, el 17 de septiembre de 2016, “Año 58 de la Revolución”.
Estimado compañero Nicolás Maduro Moros, Presidente de la República Bolivariana de Venezuela;
Jefes de Estado y de Gobierno;
Estimados Ministros, delegados e invitados;
Señoras y señores:
Somos 120 Estados No Alineados y contamos, además de los Principios de Bandung, con la Declaración sobre los Propósitos, Principios y el Papel del Movimiento de Países No Alineados en la Coyuntura Internacional Actual, aprobada en la XIV Cumbre en La Habana. No puede subestimarse nuestra enorme fuerza cuando actuamos concertadamente.
En la propia Cumbre, en 2006, rechazamos los intentos de “cambio de régimen” y llamamos a garantizar que todo país se abstuviera de recurrir a la agresión y al uso de la fuerza.
También en La Habana, en enero del 2014, los Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), con la firma de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, reafirmamos el compromiso con los principios de la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional; con la solución de diferencias de forma pacífica y el pleno respeto al derecho inalienable de todo Estado a elegir su sistema político, económico, social y cultural como condición esencial para asegurar la convivencia entre las naciones.
Sin embargo, somos testigos de los crecientes ataques a la soberanía y autodeterminación de Venezuela. Cuba reafirma su incondicional respaldo al gobierno y pueblo venezolanos, a la unión cívico-militar y al presidente constitucional Nicolás Maduro Moros (Aplausos).

Rechazamos enérgicamente el golpe de Estado parlamentario-judicial en Brasil contra la presidenta Dilma Rousseff, que constituye un acto de desacato a la voluntad soberana del pueblo que la eligió con más de 53 millones de votos.
La hermana Colombia tendrá todo el apoyo de Cuba para avanzar en el difícil camino de la implementación del Acuerdo y la consolidación de la Paz justa y duradera que merece su pueblo.
Expresamos nuestra confianza en que el pueblo de la República Árabe Siria será capaz de resolver sus diferencias por sí mismo, sin injerencias externas dirigidas a promover un cambio de régimen.
Compañero Presidente:
Resulta inaceptable que todavía el pueblo palestino continúe siendo víctima de la ocupación y la violencia, y que la potencia ocupante siga impidiendo la creación de un Estado palestino independiente con Jerusalén Oriental como su capital.
Todos los intentos de garantizar la autodeterminación del sufrido pueblo saharaui se han frustrado, lo que requiere la acción de la comunidad internacional.
Nos solidarizamos con la histórica demanda del pueblo puertorriqueño en pro de su autodeterminación e independencia.
Respaldamos también el reclamo de la República Argentina sobre las islas Malvinas, Sandwich del Sur y Georgias del Sur.
Estimado compañero Maduro:

Para Cuba, la no alineación significa la lucha por modificar radicalmente el Orden Económico Internacional impuesto por las grandes potencias, que ha conducido a que 360 personas posean una riqueza anual superior a los ingresos del 45% de la población mundial. La brecha entre países ricos y pobres crece. La transferencia de tecnologías del Norte al Sur es una aspiración esquiva.
La globalización favorece fundamentalmente a un selecto grupo de países industrializados. La deuda de los países del Sur se multiplica y suma más de 1 700 millones de millones de dólares.
Dos mil novecientos millones de personas son empujadas al desempleo y la pobreza extrema; millones de niños mueren cada año por causa del hambre y de enfermedades prevenibles; casi 800 millones de personas no saben leer ni escribir, mientras más de 1,7 millones de millones de dólares se dedican a gastos militares.
La no alineación significa también la lucha por eliminar las brechas del conocimiento y por el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones en pro del desarrollo y la cooperación. Rechazamos su creciente militarización y uso agresivo contra terceros países.
El cambio climático se agrava y persisten en los países desarrollados patrones irracionales de producción y consumo que amenazan las condiciones de existencia de nuestra especie.
La realización de los derechos humanos continúa siendo un sueño para millones de personas en todo el mundo. Estados Unidos y Europa emplean la manipulación, la doble moral, la selectividad y la politización, mientras oleadas de refugiados se agolpan en las fronteras europeas sin hallarse soluciones justas, estables y permanentes, que protejan su vida y dignidad.
Estimado presidente Maduro:

Han transcurrido 21 meses desde que anunciamos imultáneamente con el presidente Barack Obama, la decisión de restablecer las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos.
Ha habido algunos avances, sobre todo en el ámbito diplomático y de la cooperación en temas de interés mutuo, pero no ha sido igual en la esfera económico-comercial, debido al alcance limitado, aunque positivo, de las medidas adoptadas hasta ahora por el gobierno estadounidense.
Cuba seguirá reclamando el levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero, que tantos daños y privaciones nos causa y que afecta también a muchos países por su alcance extraterritorial; y continuará demandando que se devuelva a nuestra soberanía el territorio ilegalmente ocupado por la Base Naval de Estados Unidos en Guantánamo.
Sin esto no podrá haber relaciones normales, como tampoco será posible si no se pone fin a otras políticas aún vigentes que son lesivas a la soberanía de Cuba, como los programas subversivos e injerencistas.
Ratificamos la voluntad de sostener relaciones de convivencia civilizada con Estados Unidos, pero Cuba no va a renunciar a uno solo de sus principios, ni a realizar concesiones inherentes a su soberanía e independencia (Aplausos). No va a ceder en la defensa de sus ideales revolucionarios y antiimperialistas, ni en el apoyo a la autodeterminación de los pueblos.
Compañero Maduro:
Le deseamos todo el éxito a la hermana República Bolivariana de Venezuela al frente de los Países No Alineados, a la vez que felicitamos a la República Islámica de Irán por su labor en el mandato recién concluido.
La única alternativa ante los enormes peligros y desafíos que tenemos por delante es la unidad y la solidaridad en defensa de nuestros objetivos e intereses comunes.
Muchas gracias (Aplausos).

Cubadebate: 17-09-16

Nota: La introducción y el final corresponde a quien suscribe.
Además suelo visitar todas las noches los siguientes periódicos digitales en sus  portadas:
Cubanos:
Cubadebate: Si dijo.
Granma: Si dijo.
Juventud Rebelde: Si dijo.
Cambios en Cuba: Si dijo.
Argentino:
Pagina12: Si dijo.
México
La Jornada: Si dijo.
Venezuela:
Aporrea: Si dijo.
España:
El País: No dijo. (Tiene dos artículos pero para criticar a Nicolás Maduro)
Rebelión: Si dijo.
El Plural: No dijo.
Publico.es: No dijo.
Canarias:
Canarias Ahora: No dijo.
El Día: No dijo.
Canarias7: No dijo. (Este periódico tiene una nota, el día 18-09-16, al respecto pero es para exaltar al mercenario, fascista Enríquez Capriles)
Canarias Semanal: No dijo.
Estados Unidos:
El Nuevo Herald: No dijo.
¿Les  aplicamos lo de Sara Rosenberg? ¡Si, con toda seguridad!
Son unos hijos de su madre, en el sentido peyorativo. Así tiene las mentes cuadriculadas.
¡¡VIVA  LA REPLUBLICA!!
La Habana, 18-09-16
Manuel Trujillo Artiles

miércoles, 14 de septiembre de 2016

¿LAS MENTIRAS DEL 11 DE SEPTIEMBRE DEL 2001?



“Hegel dice en alguna parte que todos los grandes hechos y personajes   de la historia universal aparecen, como si dijéramos, dos veces.
Pero se olvidó de agregar: una vez como tragedia y la otra como
Farsa
Carlos Marx,

15 AÑOS DE CRÍMENES

Por Thierry Meyssan
Estados Unidos y sus aliados conmemoran los 15 años de los hechos del 11 de septiembre de 2001. Thierry Meyssan aprovecha la ocasión para pasar en revista la política de Washington desde aquellos acontecimientos… y el balance resulta particularmente sombrío. Sólo caben dos posibilidades: o la versión de los atentados que defiende la Casa Blanca es auténtica, y en ese caso su respuesta a los ataques ha resultado tremendamente contraproducente, o se trata de un engaño y Estados Unidos ha logrado saquear el Gran Medio Oriente.
Hace 15 años, el 11 de septiembre de 2001, hacia las 10 de la mañana, Richard Clarke, entonces coordinador nacional para la seguridad, la protección de la infraestructura y el contraterrorismo, activaba el «Plan de Continuidad del Gobierno» [1]. Según Richard Clarke, se trataba así de responder a la situación excepcional creada por 2 aviones que se habían estrellado contra las Torres Gemelas del World Trade Center, en Nueva York, y por un tercer avión que se había estrellado contra el Pentágono.
Pero el «Plan de Continuidad del Gobierno» había sido concebido como respuesta a la destrucción de las instituciones democráticas provocada, por ejemplo, por un ataque nuclear. Nunca estuvo previsto activarlo en una situación en la que el presidente y el vicepresidente de Estados Unidos así como los presidentes de la Cámara de Representantes y el Senado estuviesen vivos y en condiciones de seguir ejerciendo sus funciones.
La activación de ese plan puso las responsabilidades del presidente de los Estados Unidos en manos de una autoridad militar alternativa con base en Mount Weather [2]. Esa autoridad militar sólo devolvió las prerrogativas presidenciales al presidente George W. Bush Jr, al final de aquel día. La identidad de los miembros de esa autoridad y las decisiones que tomaron durante aquellas horas siguen en secreto.
Dado el hecho que, el 11 de septiembre de 2001, el presidente estadounidense se vio privado de las prerrogativas inherentes a su cargo durante unas 10 horas, en violación de la Constitución de los Estados Unidos, es técnicamente exacto hablar de «golpe de Estado». Por supuesto, el uso de esa expresión puede resultar chocante, porque estamos hablando de Estados Unidos, porque el hecho se produjo en circunstancias excepcionales, porque la autoridad militar nunca reivindicó el hecho y porque finalmente devolvió el poder al presidente constitucional. A pesar de todo eso, el hecho es que se trató, stricto sensu, ni más ni menos que de un «golpe de Estado».
En un libro célebre, publicado en 1968, reeditado y convertido en lectura obligada de los neoconservadores durante la campaña electoral del año 2000, el historiador Edward Luttwak explicaba que un golpe de Estado verdaderamente exitoso es aquel cuya existencia nadie percibe, ya que al no percibirlo nadie tratará de oponerse a él [3].
Seis meses después de aquellos hechos, publiqué un libro sobre las consecuencias políticas de aquel día [4]. Los medios de prensa solamente hablaron de los cuatro primeros capítulos, en los que demostraba que la versión oficial no podía ser cierta. Fui muy criticado por no proponer mi propia versión de aquel día, pero no tengo tal versión y hoy en día sigo abrigando al respecto más preguntas que respuestas.
En todo caso, los 15 años transcurridos nos aclaran lo sucedido aquel día.

Desde el 11 de septiembre de 2001, el Estado federal se halla
al margen de la Constitución

En primer lugar, aunque la aplicación de algunas de sus disposiciones fueron brevemente suspendidas en 2015, Estados Unidos sigue viviendo actualmente bajo los términos de la USA Patriot Act. Adoptado apresuradamente, 45 días después del golpe de Estado, ese texto constituye una respuesta al terrorismo. Dado su volumen, sería más adecuado hablar de un código antiterrorista que de una simple ley. Se trata, en realidad, de un texto preparado por la Federalist Society durante los 2 años anteriores a los hechos del 11 de septiembre. Sólo 4 parlamentarios se opusieron a su adopción.
La USA Patriot Act, o Acta Patriótica, suspende las limitaciones que la Constitución de los Estados Unidos podría imponer a las iniciativas del Estado federal en materia de lucha contra el terrorismo. Esas limitaciones están formuladas en la «Carta de Derechos», o sea en las 10 primeras enmiendas de la Constitución y su suspensión corresponde al principio del estado de emergencia permanente. El Estado federal puede entonces practicar la tortura fuera de su territorio y espiar masivamente a su población. Al cabo de 15 años de aplicación de tales prácticas ya no es técnicamente posible que Estados Unidos pretenda presentarse como un «Estado de derecho».
Para aplicar el Acta Patriótica, el Estado federal comenzó por crear un nuevo ministerio: el Departamento de Seguridad de la Patria (United States Department of Homeland Security). El nombre real de este ministerio estadounidense resulta tan chocante que en el mundo entero lo traducen como «Seguridad Interna» o «Seguridad Nacional», lo cual es falso.
Posteriormente, el Estado federal se dotó de un conjunto de cuerpos de policía política que, según un amplio estudio del Washington Post empleaban en 2010 al menos 850 000 nuevos funcionarios para espiar a 315 millones de habitantes [5].
La gran innovación institucional de ese periodo es la relectura de la separación de poderes. Hasta entonces se consideraba, según la concepción de Montesquieu, que la separación de poderes permitía mantener un equilibrio entre el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y el Poder Judicial, equilibrio indispensable para el buen funcionamiento y la preservación de la democracia. Estados Unidos podía enorgullecerse de ser el único país del mundo que aplicaba estrictamente el principio de separación de poderes. Actualmente, por el contrario, la separación de poderes significa que el Poder Legislativo y el Poder Judicial ya no tienen posibilidad de control sobre los actos del Ejecutivo. Es incluso en virtud de esta nueva interpretación que el Congreso estadounidense no fue autorizado a debatir las condiciones del golpe de Estado del 11 de septiembre de 2001.
Contrariamente a lo que escribí en 2002, los Estados de Europa Occidental se resistieron a esa evolución. No fue hasta hace un año y medio que Francia cedió y adoptó el principio del Estado de emergencia permanente, a raíz de la masacre perpetrada en las oficinas del semanario satírico Charlie-Hebdo. Esa mutación interna viene acompañada de un cambio radical en materia de política exterior.

Desde el 11 de septiembre de 2001, el Estado federal estadounidense, al margen de la Constitución, ha saqueado el Gran Medio Oriente

En los días posteriores a los hechos del 11 de septiembre de 2001, George W. Bush –quien ya había recuperado sus prerrogativas presidenciales en la noche del 11 de septiembre– declaró a la prensa: «Esta cruzada, esta cruzada contra el terrorismo, llevará tiempo» [6]. Aunque se excusó después por haberse expresado en esos términos, la selección de las palabras que utilizó en su declaración indicaba que el enemigo decía actuar en nombre del islam y que la guerra sería larga.
En efecto, por primera vez en su historia, Estados Unidos está en guerra ininterrumpidamente desde hace 15 años. Ese país definió su Estrategia Contra el Terrorismo [7], estrategia que la Unión Europea no tardó en copiar [8].
Si las sucesivas administraciones estadounidenses han presentado esa guerra como una persecución de Afganistán a Irak, de Irak hacia África, Pakistán y Filipinas y luego hacia Libia y Siria, el general estadounidense Wesley Clark, ex Comandante Supremo de la OTAN, confirmó, por el contrario, la existencia de un plan a largo plazo. El 11 de septiembre de 2001, los autores del golpe de Estado decidieron cambiar todos los gobiernos amigos existentes en el «Medio Oriente ampliado», o Gran Medio Oriente, y hacer la guerra a los 7 gobiernos que oponían resistencia en esa región. El presidente Bush Jr. tomó nota de esa orden, 4 días después, durante una reunión organizada en Camp David. Hoy es evidente que ese programa se puso en aplicación y que aún está en marcha.
Estos cambios de regímenes amigos mediante revoluciones de colores y las guerras desatadas contra los regímenes que resistían al dictado estadounidense no tenían como objetivo la conquista de esos países en el sentido imperial clásico –en definitiva, Washington ya tenía a esos aliados bajo control– sino saquearlos. En esta región del mundo, sobre todo en el Levante, la explotación de esos países no sólo encontraba la resistencia de las poblaciones sino que existía un obstáculo adicional: la presencia de una extraordinaria cantidad de ruinas de civilizaciones antiguas. O sea, no sería posible saquearla a fondo sin enfrentar la crítica de los defensores de ese patrimonio histórico de la humanidad.
Según el presidente Bush Jr., los atentados del 11 de septiembre de 2001 fueron perpetrados por al Qaeda, lo cual justificaba el ataque contra Afganistán mucho mejor que la ruptura –en julio de 2001– de las negociaciones petroleras con los talibanes. La teoría de Bush fue desarrollada por su secretario de Estado, el general Colin Powell, quien prometió presentar al Consejo de Seguridad de la ONU un informe sobre ese tema. Pero no sólo Estados Unidos nunca encontró tiempo –en 15 años– para redactar ese informe sino que el pasado 4 de junio el ministro ruso de Relaciones Exteriores reveló que su homólogo estadounidense John Kerry le pidió que Rusia no atacara a al Qaeda –aliado de Estados Unidos– en Siria, revelación extremadamente sorprendente que la parte estadounidense nunca desmintió.
Al principio, el Estado federal estadounidense al margen de la Constitución prosiguió adelante con su plan, mintiendo descaradamente al mundo entero. Después de prometer un informe sobre el papel de Afganistán en los hechos del 11 de septiembre, Colin Powell mintió una y otra vez ante el Consejo de Seguridad de la ONU en un largo discurso destinado a vincular el gobierno de Irak con aquellos atentados y a acusarlo de querer prolongar la masacre utilizando armas de destrucción masiva [9].
El Estado federal liquidó en días la mayor parte del ejército iraquí, saqueó los 7 principales museos de Irak y quemó la Biblioteca Nacional [10]. Puso en el poder una Autoridad Provisional de la Coalición, que no era un órgano de la coalición de países participantes en la invasión de Irak sino una empresa privada, al estilo de la siniestra Compañía de Indias y perteneciente fundamentalmente a Kissinger Associates [11]. Durante todo un año esa compañía saqueó todo lo que se podía saquear en Irak. Finalmente entregó el poder a un gobierno títere iraquí, pero antes le hizo firmar un documento comprometiéndose a que nunca exigiría reparaciones de guerra y que no modificaría –durante un siglo– las leyes comerciales draconianas redactadas por la Autoridad Provisional.
En 15 años, Estados Unidos sacrificó más de 10 000 estadounidenses, mientras que la guerra dejaba más de 2 millones de muertos en el «Medio Oriente ampliado» [12]. Para acabar con aquellos que designa como sus enemigos, Estados Unidos ha gastado más 3500 millardos [13] de dólares [14]. Y hoy anuncia que la masacre y el derroche de fondos van a continuar.
Extrañamente, ese derroche de miles de millardos de dólares no ha debilitado económicamente a Estados Unidos. Se trataba de una inversión que permitió a ese país saquear toda una región geográfica del mundo, apoderándose de sumas muy superiores.
Contrariamente a la retórica del 11 de septiembre, la retórica de la guerra contra el terrorismo es lógica. Se basa en una gran cantidad de mentiras presentadas como hechos comprobados. Por ejemplo, la filiación entre el Emirato Islámico (Daesh) y al-Qaeda se explica recurriendo a la personalidad de Abu Mussab al-Zarkaui, personaje al que el general Colin Powell dedicó buena parte de su discurso ante el Consejo de Seguridad de la ONU. El problema es que el propio Powell reconoció posteriormente haber mentido descaradamente en el aquel discurso y es imposible verificar ni el menor elemento de la biografía de al-Zarkaui según la CIA.
Si se admite que al-Qaeda es la continuación de la Legión Árabe de Osama ben Laden, creada como tropa mercenaria de la OTAN durante las guerras contra Yugoslavia [15] y contra Libia, también hay que admitir que al-Qaeda en Irak, convertido en Emirato Islámico en Irak y posteriormente en Daesh, es la continuación de esa organización yihadista.
Dado el hecho que, a la luz del derecho internacional, el saqueo y la destrucción del patrimonio histórico son ilegales, el Estado federal estadounidense al margen de la Constitución de Estados Unidos comenzó poniendo el trabajo sucio en manos de ejércitos privados, como Blackwater [16]. Pero su responsabilidad seguía siendo demasiado visible [17]. Asi que decidió confiar el trabajo sucio a su nuevo brazo armado: los yihadistas. A partir de ese momento, el saqueo del petróleo –que en definitiva se consume en Occidente– es imputable a esos extremistas y la destrucción del patrimonio histórico se atribuye al fanatismo religioso de estos.
Para entender la colaboración entre la OTAN y los yihadistas, tenemos que preguntarnos que sería hoy de la influencia de Estados Unidos si no existieran estos yihadistas. El mundo sería multipolar y Washington habría cerrado la mayor parte de sus bases militares a través del mundo. Estados Unidos sería una potencia más.
Esta colaboración entre la OTAN y los yihadistas resulta chocante incluso a numerosos altos responsables estadounidenses, como el general Carter Ham, comandante del AfriCom, quien se negó en 2011 a trabajar con al-Qaeda y tuvo que renunciar al mando de la agresión contra Libia. Otro de esos responsables, el general Michael T. Flynn, director de la Defense Intelligence Agency, se negó a otorgar su aval a la creación del Emirato Islámico y fue obligado a dimitir [18]. Más recientemente, la colaboración CIA-yihadistas se convirtió en tema de la campaña electoral por la presidencia de Estados Unidos: de un lado, Hillary Clinton, miembro de The Family, la secta de los jefes de estado mayor [19]; del otro lado, Donald Trump, quien cuenta entre sus consejeros al ya mencionado general Michael T. Flynn y 88 oficiales superiores [20].
Al igual que en tiempos de la guerra fría, cuando Washington controlaba a sus aliados europeos a través del Gladio, o «los ejércitos secretos de la OTAN» [21], hoy en día Estados Unidos controla el Medio Oriente ampliado, el Cáucaso, el valle de Ferghana y hasta la región de Xinjiang a través del «Gladio B» [22].
Quince años más tarde, las consecuencias del golpe de Estado del 11 de septiembre no son obra de los musulmanes, ni del pueblo estadounidense sino de quienes lo perpetraron y de sus aliados. Son ellos quienes convirtieron la tortura en una simple herramienta, generalizaron las ejecuciones extrajudiciales perpetradas ahora en cualquier lugar del mundo, debilitaron la ONU, masacraron más de 2 millones de personas, saquearon y destruyeron Afganistán, Irak, Libia y gran parte de Siria.
 [1] Against All Enemies, Inside America’s War on Terror, Richard Clarke, Free Press, 2004, Ver el primer capítulo, titulado «Evacuate the White House».
[2] A Pretext for War, James Bamford, Anchor Books, 2004, ver el capítulo 4, titulado «Site R».
[3] Coup d’État: A Practical Handbook, Edward Luttwak, Allen Lane, 1968. Junto a Richard Perle, Peter Wilson y Paul Wolfowitz, Edward Luttwak era uno de los «Cuatro mosqueteros» de Dean Acheson.
[4] La grand impostura, Thierry Meyssan, La Esfera, 2002.
[5] Top Secret America: The Rise of the New American Security State, Dana Priest y William M. Arkin, Little, Brown and Company, 2011.
[6] «A Fight vs. Evil, Bush and Cabinet Tell U.S.», Kenneth R. Bazinet, Daily News, 17 de septiembre de 2001.
[7] National Strategy for Combating Terrorism, The White House, febrero de 2003.
[8] Una Europa segura en un mundo mejor – Estrategia Europea de Seguridad, Javier Solana, Consejo Europeo, 12 de diciembre de 2003.
[9] “Colin Powell Speech at the UN Security Council”, Colin L. Powell, Voltaire Network, 11 February 2003.
[10] «Discours du directeur général de l’Unesco», Koichiro Matsuura, 6 de junio de 2003, Réseau Voltaire, 6 de junio de 2003.
[11] The Coalition Provisional Authority (CPA): Origin, Characteristics, and Institutional Authorities, Congressional Research Service, L. Elaine Halchin, April 29, 2004.
[12] Body Count, Casualty Figures after 10 Years of the “War on Terror”, Physicians for Social Responsibility (PSR), marzo de 2015.
[13] 1 millardo = 1 000 millones
[14] The Three Trillion Dollar War, Joseph Stiglitz y Linda Bilmes, W. W. Norton, 2008.
[15] Wie der Dschihad nach Europa Kam, Jürgen Elsässer, NP Verlag, 2005. Existe una edición francesa titulada Comment le Djihad est arrivé en Europe [En español, “Cómo llegó la yihad a Europa”], Xenia, 2006.
[16] Blackwater: The Rise of the World’s Most Powerful Mercenary Army, Jeremy Scahill, Avalon Publishing Group/Nation Books, 2007.
[17] The Powers of War and Peace: The Constitution and Foreign Affairs after 9 11, War by Other Means: An Insider’s Account of the War on Terror, John Yoo, University Of Chicago Press, Atlantic Monthly Press, 2006.
[18] DIA Declassified Report on ISIS, August 12, 2012.
[19] The Family: The Secret Fundamentalism at the Heart of American Power, Jeff Sharlet, Harper, 2008.
[20] “Open Letter From Military Leaders Supporting Donald Trump”, Voltaire Network, 9 September 2016.
[21] Nato’s Secret Armies: Operation Gladio and Terrorism in Western Europe, Daniele Ganser, Frank Cass, 2004. Edición francesa, Les Armées Secrètes de l’OTAN: Réseaux Stay Behind, Opération Gladio et Terrorisme en Europe, Éditions Demi-Lune, 2007. El lector hispanohablante puede encontrar ese libro, traducido al español y publicado por capítulos en nuestro sitio web consultando este vínculo.
[22] Classified Woman, The Sibel Edmonds Story: A Memoir, Sibel D. Edmonds, SE 2012.
Red Voltaire: 12-09-16