Mi querido amigo; Que en paz descanse.
El pasado 29 de enero entro en el periódico digital “Canarias Ahora” y en
su apartado “TOPSECRET” (Tuve que llegar hasta el final de la página que si no
me entero) Me encuentro con la triste noticia de que ya te has ido entre los
mortales. Es decir, de este mundo loco, loco, loco. Es una pena porque con lo
que está cayendo hacías falta para decirle a estos, ahora le han cambiado el
nombre a los que despilfarra, roban, desvía dinero, los bandidos,
sinvergüenzas, canallas, traidores, prevaricadores, Son una recua de
maleantes y ladrones; un atajo de hipócritas y mangantes; una camarilla de
atracadores, de evasores, de farsantes. Y hace todo lo que le da la gana con el dinero público, digo que ahora se
le llama según la ley “supuesto”. Esto, cuando se trata de políticos, reyes y
sus familiares.
Me imagino viéndote delante del micro con tu sonrisa socarrona y tus ojos
bailando de un lado para el otro, revolviendo los periódicos del día y con la
tijera recortando para sacarle astilla según tu criterio a todo Cristo.
Tú, Ángel, no te andabas por las ramas y llamaba a las cosas, desde tu
punto de vista con el “Al pan, pan y al vino, vino”. Precisamente por eso te
creaste muchos enemigos por tu forma de ser. Pero eras cojonudo con un micro
delante ya fuera en radio o TV. Fuiste un gran periodista. De lo que no se
casaba con nadie. Quizás por eso no hayas tenido mucha resonancia en los
medios. Por lo menos a los que tengo acceso desde Internet.
Eras un desastre en tu propia organización. Tu mesa de trabajo era un
desastre. Recorte de periódico por aquí por allá. Pero eras cojonudo.
Decías las cosas por su nombre, según tu criterio. Atacaba por la derecha,
por la izquierda, hasta por el centro cuando lo había. Nunca me negaste tus
micrófonos antes en radio en los tiempos del franquismo en tu “Radio
Atlántico”, en la Calle “General Franco”, hoy “Primero de Mayo”. Esto lo hacías
en unión de tu gran amigo Segundo Almeida. Horario a las 5 de la tarde.
Joder chico, cuando decidí venirme para Cuba me hiciste toda clase de
críticas. Todas en el sentido bueno. No querías que dejara nuestra TIERRA
linda. Me insultabas y me decías que no me fuera ya que hacíamos falta para la
lucha. Siempre me atacabas. Pero eras un buen amigo.
Desde que te enteraba a través de Juan, el del Sindicato Canario, que
estaba en Canarias me buscabas para tirarme de las orejas y además para que te
informara de cómo andaba las cosas en la Cuba del “Che” y del Fidel. No
comulgabas con estos. Pero me respetabas mi pensamiento. Ángel, ¡Mira que
discutíamos! Pero siempre terminábamos en el bar tomando nuestro café yo y tú,
tu manzanilla. Eras terrible con un micro delante. Igual atacabas a Carmelo Ramírez
como luego le echabas un piropo. Atacabas a cualquier alcalde, concejales,
consejeros del Cabildo, del Gobierno de Canarias, o del mismo gobierno central
de la metrópoli como te gustaba que yo le llamara.
No creas que no te he escrito antes porque se me había olvidado. Es que he
estado un poquitín enfermo. Ya estoy recuperado. Así que donde quieras que
estés da la noticia de que estoy recuperado. La lucha continúa.
La última vez que discutimos fue sobre el mercenario poeta al servicio del
imperio a través del periódico “El Mundo” Raúl Rivero. E incluso casi nos
“fajamos” por los mercenarios en Cuba porque no creías que cobraban por hacer
el servicio al imperio yanquis. Siempre que los escritos y los comentarios
fuera contra Cuba Pero al final nos dábamos un gran abrazo sincero. Entre
nosotros lo del “Al pan, pan y al vino, vino” lo llevamos hasta sus últimas
consecuencias. Era una amistad sincera. Como son los buenos amigos.
Quizás los mezquinos se hayan alegrado de tu ida. Para nosotros los que te
tratamos y nos respetábamos no te has ido. Espero que haya alguien que se
atreva poner tu nombre a alguna calle, en algún pueblo por tu trabajo y
desempeño en la ayuda siempre de los más pobres. Sobre todo a los trabajadores.
Ángel, fuiste un auténtico azote para los de derechas como para los de
izquierda como hemos dicho antes. Era tu forma de ser. Por eso te ganabas el
odio o la simpatía de unos y de otros respectivamente. Pero eras sincero. Estas
actitudes molestan.
Por ahora hemos perdido un lector de nuestros artículos ya que me seguía
cuando escribía en “TeldeActualidad” hasta que me dejaron de publicar y luego
lo hacía en “Independencia y Socialismo”. También me había dicho Juan, el del
“Cruce de Sardina” el del “SOC” que continuabas leyéndome en “Unidad y
Resistencia”.
Bueno amigo. Ya nos veremos para continuar con nuestras batallas por
caminos diferentes pero el fin era el mismo. ¡¡LA JUSTICIA SOCIAL!!
Permíteme que me despida, por ahora, con un saludo que te gustaba mucho,
sobre todo dicho por este tu amigo. ¡¡Patria o Muerte. Venceremos!! La
salvación del mundo es el Comunismo.
Mi querido amigo, tu lucha fue hasta última hora, entonces:
BERTOLT
BRECHT
Cuando los que luchan
contra la injusticia
muestran sus caras ensangrentadas,
la incomodidad
de los que están a salvo
es grande. ¿Por qué se quejan ustedes?,
les preguntan.
¿No han combatido la injusticia?
Ahora ella los derrotó.
No protesten.
El que lucha debe saber perder
El que busca pelea
se expone al peligro.
El que enseña la violencia
no debe culpar a la violencia.
Ay, amigos.
Ustedes que están asegurados,
¿por qué tanta hostilidad?
¿Acaso somos vuestros enemigos
los que somos enemigos de la injusticia?
Cuando los que luchan contra la injusticia
están vencidos,
no por eso tiene razón
la injusticia.
Nuestras derrotas
lo único que demuestran
es que somos pocos
los que luchan contra la infamia.
Y de los espectadores, esperamos
que al menos se sientan avergonzados.
Cuando los que luchan
contra la injusticia
muestran sus caras ensangrentadas,
la incomodidad
de los que están a salvo
es grande. ¿Por qué se quejan ustedes?,
les preguntan.
¿No han combatido la injusticia?
Ahora ella los derrotó.
No protesten.
El que lucha debe saber perder
El que busca pelea
se expone al peligro.
El que enseña la violencia
no debe culpar a la violencia.
Ay, amigos.
Ustedes que están asegurados,
¿por qué tanta hostilidad?
¿Acaso somos vuestros enemigos
los que somos enemigos de la injusticia?
Cuando los que luchan contra la injusticia
están vencidos,
no por eso tiene razón
la injusticia.
Nuestras derrotas
lo único que demuestran
es que somos pocos
los que luchan contra la infamia.
Y de los espectadores, esperamos
que al menos se sientan avergonzados.
Unidad y
Resistencia¨08-12-12
Lo dicho Ángel:
Un abrazo REPUBLICANO porque tú sabes que no soy monárquico.
Permítame que continúe, ya que en tus diferentes programas lo tratábamos
siendo de obligado cumplimiento por tu sensibilidad sobre el tema, con el
reclamo por la:
¡¡¡LIBERTAD PARA LOS CINCO HÉROES CUBANOS
PRESOS EN LAS CÁRCELES DE LOS ESTADOS UNIDOS POR LUCHAR CONTRA EL TERRORISMO!!!
Saludos Republicanos
La Habana, 08-02-13
Manuel Trujillo Artiles.
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